Con gran ilusión comenzamos el taller con una sesión de toreo de salón.
Fue una sorpresa ver el buen nivel de algunos aficionados y una alegría ver iniciarse a otros en el manejo de los trastos.
La sesión lejos de ser caótica resultó intensa y emocionante.
Quiero agradecer muy especialmente a Ricardo Maldonado y César Sánchez, novilleros, Alberto Berzosa, banderillero y al extraordinario aficionado práctico y buen amigo Juan Mateos su participación como profesores en esta sesión.
Os dejo un pequeño album de como transcurrió la tarde.
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