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martes, 18 de junio de 2013

La línea alejandrina de la casta

Taller de Tauromaquia. Tudela de Duero. 16 de junio de 2013.

Hoy hemos vuelto a disfrutar de torear.

No suelo hacerlo porque me da miedo, pero a primera hora he ido a los corrales a ver las becerritas que nos esperaban para la tarde.
Abajo, recién llegados, 3 diminutos zafiros de zahína negrura, levantaban sus hociquitos de rata desafiando a los impostores de toreros que curioseábamos desde arriba de la corraleta.
Lustrosas, con la hierba en la boca de esta primavera abundante, apenas han tenido tiempo de desarrollar unos pitoncitos que no encogen a nadie.
Sin embargo el pelo brillante y la mirada viva revelan, inconfundibles, la herencia de Santa Coloma: "por dentro fuego y carbón".

Mientras las veía, a mi espalda escuché decir a alguien:

-Hoy os va a tocar correr.

No sé por qué, pero en ese instante me vino a la cabeza el momento en el que el Papa Alejandro trazó la línea que dividió el mundo en dos mitades.
Hace tiempo que esa línea perdió su vigencia y quedó relegada a los libros de historia.

En el toreo es la casta la línea alejandrina que separa las emociones: a un lado la lucha y el desafío de vencer, al otro la suavidad, la plástica y la expresión.
¿Paradigmas incompatibles? Pienso que no. ¿Distintos? Sin duda. ¿Necesarios? Por supuesto.
Una línea que enriquece la Fiesta y que, como aficionados, debemos ayudar a remarcar, a la que no debemos volver la cara. No es un imposible.

No, hoy no toca correr. Hoy nos toca a nosotros.
Hoy toca atravesar la línea de la casta y hacer acopio de firmeza y torería. Y engrosar las filas de los que saben lo que cuesta dominar esa embestida, conducirla y finalmente disfrutar orgullosos de haber superado una prueba difícil.

Seguramente cuando leáis esto, muchos de vosotros todavía sintáis, como yo ahora, la quemazón y la piel amoratada que dejan varetazos y achuchones, mezclada con la íntima satisfacción de haberos sentido toreros.
Mi enhorabuena a todos y bienvenidos -por un instante- al territorio de los valientes.

Gracias a David Sánchez Carabias y a cuantos os ocupásteis de ir turnando la cámara de fotos para captar estas imágenes.

2 comentarios:

  1. Bonita y literaria entrada digna de quien la escribe. Hay es n´a el brillo de las becerras y el empujen que tienen, "envisten hasta con el rabo", y a la primera se cuelan p´a dentro. Felicitaciones a todos y SANTA COLOMA ES ASÍ.
    Un abrazo Felipe tu siempre con ARTE.

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  2. Cuanto me alegra que te guste Juan y he de confesarte así, entre nosotros y sin que se entere nadie, que este es el encaste que más me gusta para torear y para ver torear.
    Y el otro día, en un momento de apuro con la becerra, me acordé de tí en Encina Hermosa y encontré la solución.
    Un abrazo.

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